Humildad… ¿por qué? (A la luz de la Teosofía)
Ventana de la humildad
Los jóvenes a menudo preguntan: “¿Por qué debemos ser humildes? ¿No basta con hacer el bien social? ¿Qué necesidad hay de un trabajador social o un líder nacional de humildad? Recordemos que el trabajador es Dios y el hombre es solo su instrumento. Dejaríamos de sentirnos orgullosos si creciera en nosotros la conciencia de que Dios es el trabajador, el ayudador y el salvador de las naciones. Zaratustra ofrece una vívida imagen del infierno, diciendo que en él hay numerosas almas, tantas como los pelos de la crin de un caballo, y que están tan cerca unas de otras como nuestros oídos de nuestros ojos, ¡y sin embargo, todos se sienten solos! Es este sentimiento de soledad la raíz de la miseria en nuestro mundo moderno. La riqueza de la vida radica en reconocer que en nuestro trabajo estamos en contacto con lo Divino y dependemos de Ello.